¿Continuidad o permuta?, ¿Girondins u Olympique? Dos formas de lograr ser el mejor de la nueva temporada

Permuta total para volver al trono francés...
Tras una temporada en la que el Olympique de Marsella disputó mano a mano el campeonato con el Girondins Bourdeaux, finalmente no logró mantener el ritmo impuesto por el equipo dirigido por Laurent Blanc, y terminó como subcampeón en la última jornada.
Dos meses después, poco más de un tercio de la plantilla que acabó la temporada anterior continúa en el club. La marcha de Eric Gerets dio fin a un grupo de futbolistas, un grupo que rozó el límite de lo que podía dar, y es que acostumbrados al gran Olympique que contemplábamos varias décadas atrás, ahora mismo el club era una medianía dentro de un campeonato francés que más bien parecía un monopolio durante los últimos años.
Como decía, Eric Gerets decidió no continuar en el banquillo y el nuevo presidente consideró dar el mando a Didier Deschamps para formar una nueva y mejor plantilla, más reforzada y con ambición, con la idea de volver a ver un gran equipo en el Velodrome dentro de pocos años. Libertad total para Didier Deschamps en el ámbito deportivo, capacidad para tomar decisiones propias y formar un grupo que trabaje como él quiera, además de un enorme ímpetu económico para conformar un equipo de totales garantías.

Para empezar, Deschamps dio una alegría a los aficionados, firmó a Lucho González, volante argentino más que conocido, a cambio de 18 millones de euros, tras figurar en la órbita de los mejores clubes europeos. El centrocampista, nuevo faro que guiará el barco de Deschamps, deberá adquirir un gran protagonismo y demostrar que vale la gran cantidad desembolsada por el club para permitirle jugar en el Velodrome.
También acompañarán al argentino en el medio campo otros tres nuevos futbolistas: Edouard Cissé y Stéphane Mbia, de corte más destructor, y Fabrice Abriel, con características más ofensivas. Stéphane Mbia también era requerido por varios equipos británicos, pero la propuesta de Didier Deschamps y la oportunidad para continuar en el campeonato francés terminó por convencer al camerunés, y el Olympique acabó acordando con el Rennes, difícil negociador, la compra de Mbia. Fabrice Abrel ficha a los 30 años por el Olympique, y parece tener un menor protagonismo, aunque era requerido por bastantes equipos tras una campaña dónde destacó por mostrar un gran criterio a la hora de manejar y distribuir el juego, por lo que en cualquier segundo puede lograr la titularidad.
Además, Benoît Cheyrou continuará en el club las próximas temporadas, tras renovar en las últimas fechas; Benoît fue el mediocentro titular durante toda la temporada anterior y los fichajes de varios jugadores provocó su replanteamiento acerca de la continuidad en el club, pero finalmente decidió renovar y continuar en la ciudad.
Tras añadir a Hatem Ben Arfa, que debe rememorar el nivel que demostró en categoría juvenil y que parecía apagada durante los últimos dos años, y a Matthieu Valbuena, el pequeño y rapidísimo extremo, el Olympique exhibe un mediocampo con gran cantidad de alternativas y un banquillo muy capaz de ocupar un puesto entre los titulares.

Defensivamente, el Olympique de Marsella logró el traspaso de Gabriel Heinze y Souleymane Diawara. De Heinze poco que decir, sobradamente conocido, gran defensa que aportará al equipo garra, brega, orden, contundencia y seguridad defensiva; es de admirar la actitud de Gabi, bajando considerablemente el sueldo a percibir para poder firmar con el Olympique. Souleymane Diawara procede del campeón, del Girondins Bourdeaux, defensa central titular durante toda la campaña anterior y básico en el esquema de Blanc, tras ser objetivo bajo la planificación deportiva de Didier Deschamps cambia de aires y buscará nuevos retos en el Olympique.
La línea más débil era sin ninguna duda el centro de la defensa, que con las dos incorporaciones adquiere un buen grado de veteranía y seguridad, muy imperioso sobre todo en competición europea, dónde los errores en defensa son determinantes para decidir un partido, cosa que ya tuvo la oportunidad de comprobar el equipo la campaña pasada.

En ataque, destacar el rimbombante fichaje de Morientes, que regresa al país galo varios años después; otra petición expresa de Didier Deschamps, que ya le tuvo en la etapa anterior y que le dio un rendimiento magnífico. El aragonés también es muy conocido para todos, y destaca en el preciso remate de cabeza y la capacidad goleadora que le ha acompañado durante toda la carrera. Un goleador de los de antes, que aportará más alternativas a una línea que cuenta con jugadores rápidos, regateadores y buenos en el desmarque, pero que pedía a gritos un futbolista diferente, que garantice una gran cantidad de goles, peligro en jugadas de estrategia y que aproveche cualquier pequeña oportunidad para anotar.


… y un equipo continuista para seguir como reyes

También ambicioso el Girondins Bourdeaux en una temporada que parece dura y muy completa, puesto que debe disputar todas las competiciones y mantener el nivel que mostró la temporada anterior en el campeonato regular. Laurent Blanc mantiene el bloque que tan bien funcionó y que logró triunfar y dominar la competición durante todo el tramo final. Únicamente pequeños, aunque importantes retoques, con la incorporación de Carrasso, Jaroslav Plasil y la retención de Gourcuff.
La portería era una posición ciertamente débil en el equipo, puesto que la veteranía de Rame, titular durante bastantes temporadas, proporcionaba la idea de buscar un portero de garantías para reemplazar al veterano guardameta francés. Carrasso es un guardameta que debutó con el conjunto de Raymond Domenech en el último partido de la campaña pasada, tras completar una grandísima temporada en el Toulouse.
Gourcuff es a todos efectos jugador de Girondins Bourdeaux, el club abonó una cifra de 13.7 millones de euros para obtener al mediapunta, cedido el último año en el club y que dio un rendimiento inmejorable, considerado mejor jugador de todo el campeonato francés en la temporada pasada, y artífice y diseñador de juego en el equipo de Blanc.
Por último, Jaroslav Plasil ficha para formar un nuevo complemento para el mediocampo tras pagar en torno a 3 millones de euros. Polivalencia es la mejor referencia de Jaroslav, que puede desplegar el desborde y la visión de juego por cualquier posición de mediocampo; una buena alternativa para un equipo que dependerá de un buen fondo de banquillo para disputar con éxito tres competiciones durante el año.

Por último, aquí dejo un video impactante, un video de esos que de convierten el fútbol en pasión, de los que crean verdadera afición... ¡disfrutadlo!